El talento es universal, las oportunidades no

No es una frase mía, pero desde que la leí la recuerdo constantemente.

Sólo hasta hace poco he logrado comenzar a superar una especie de trauma ligado con un aspecto que se ha mantenido durante prácticamente toda mi vida. Me refiero al hecho de ser calificado como "buen estudiante", "estudioso", "genio", y un montón de sinónimos más únicamente relacionados con obtener buenas calificaciones durante el colegio y la universidad.

Me gusta estudiar, aprender, me gusta obtener buenas calificaciones, y de vez en cuando me gusta algún reconocimiento por ello, pero nunca me gustó ser identificado o llamado de alguna forma debido a ello. Ser clasificado como "el mejor de la clase" o cosas por el estilo me ponían en situaciones difíciles e incómodas con mis compañeros, amigos, y más tarde, conmigo mismo.

Pero este post no se trata sobre eso. Se trata sobre cómo siento que muchos otros de mis compañeros, que no obtenían las mejores calificaciones pero que tenían otras habilidades de las que yo carecía (y tal vez aún carezco), podrían haber desempeñado muy buenos roles en gran cantidad de oportunidades laborales y académicas que estoy comenzando a ver a mi alrededor, pero no lo hacen o hicieron porque, así como yo, no sabían que tales oportunidades existen o cómo encontrarlas. No existen en nuestro entorno, allá en Pereira, o en Bogotá, o no nos las quieren mostrar, o los que nos rodean tampoco saben cómo guiarnos.

Tuve muchísimos amigos y compañeros talentosos. No muchos en obtener las mejores calificaciones, que es en lo que lastimosamente se fija casi siempre el sistema educativo, pero sí en otros aspectos. Sin embargo, pienso que las oportunidades adecuadas para algunos de ellos nunca aparecieron, o aparecieron muy tarde, o ellos desistieron en su búsqueda antes de lograr encontrar algo que encajara con sus metas.

En realidad no sé si ellos consideran que les faltaron oportunidades, únicamente me estoy basando en lo que percibí de ellos, y en lo que creo que están haciendo ahora. Pero si estoy en lo correcto con al menos alguna de esas situaciones de vida, esa persona tenía grandes sueños y tuvo que conformarse con lo que pudo encontrar cerca de sí. No hubo nunca nadie que le dijera "oiga, usted es bueno en esto, aplique acá", o "debería tomar tal rumbo en su carrera".

Y ahora que tengo la oportunidad de apreciar la vasta cantidad de ofertas laborales y académicas que existen en temas que me gustan y que seguramente les gustarían a ellos, me digo "Él desempeñaría un excelente papel acá", o "Ella sabía hacer esto, lo podría hacer igual de bien o incluso mejor", o "Esto fue lo que siempre soñamos hacer con ellos".

Yo no sé si ya encontré mi lugar en el mundo, si este sea el puesto soñado o todavía pueda encontrar algo con lo que me sienta más a gusto y que cumpla todos mis sueños, pero sí siento que al menos voy avanzando poco a poco en el camino de encontrar mi propósito en la vida.

Espero que lo que haga, comparta, y la manera como me exprese y me comporte con otros, ayude a alguien también a encontrar su propósito, aprovechar sus talentos y cumplir sus metas.